Presidente Gustavo Petro refirió que la situación que atraviesa el país en lo energético es un efecto de las decisiones de Iván Duque

El presidente Gustavo Petro ha abordado la situación energética del país en respuesta a la carta enviada por la Asociación Colombiana de Distribuidores de Energía Eléctrica (Asocodis) al ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, y al director ejecutivo de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), José Fernando Prada.

A través de su cuenta de Twitter, el mandatario compartió sus perspectivas sobre el tema. En un hilo compuesto por dos trinos, acompañados por la carta de Asocodis, el presidente expresó:

«Quiero analizar con ustedes esta carta de las empresas comercializadoras de energía que habla de un tema desconocido para la opinión pública: la llamada opción tarifaria.

La opción tarifaria fue establecida durante el gobierno de Duque de manera similar a como se trató el déficit del fondo de la gasolina, pero en el ámbito de la energía eléctrica.

Se fijaron tarifas eléctricas más bajas de lo normal, en plena época de la COVID-19, pero no se financió con las ganancias del sector eléctrico. En cambio, se convirtió en una deuda acumulada por los usuarios, que ahora deben saldar.

Al término de su mandato, esta deuda asciende a 5 billones de pesos, que ahora deben ser pagados.

Dado que las tarifas eléctricas operan de forma escalonada, las empresas generadoras recibieron el monto completo de las tarifas, mientras que las deudas de los usuarios quedaron a cargo de las comercializadoras, que cobraron menos y compraron más caro.

La mayoría de las empresas comercializadoras de energía son públicas y esperan que el gobierno aumente las tarifas por encima de lo normal, particularmente en tiempos de El Niño, para poder pagarles.

La amenaza de apagones se utiliza para asustarnos y apresurarnos a pagar la deuda generada durante el gobierno de Duque, ya sea del presupuesto o a través de las tarifas. El Ministerio de Energía presentará una propuesta para modificar parte del régimen tarifario y lograr tarifas equitativas.»

En otro trino, el presidente Petro agregó:

«Por ejemplo, las remuneraciones a las generadoras eléctricas, que se calculan en la bolsa, siguen un método obsoleto y perjudicial para los usuarios.

La generación eléctrica se paga en función del precio del generador más costoso.

La generación eléctrica más barata proviene de fuentes hidroeléctricas, que es la mayoría de nuestra energía. Luego vienen las termoeléctricas a gas, carbón y diésel, mientras que la más costosa es el gas importado a precios internacionales en medio del conflicto en Ucrania.

En resumen, los usuarios que compran energía de comercializadoras que a su vez la adquieren en la bolsa están pagando el precio basado en el costo del gas en tiempos de conflicto en Ucrania, incluso si proviene de nuestras fuentes hidroeléctricas mucho más económicas.

En términos económicos, esto es una renta diferencial, lo que significa que las empresas con tecnologías menos costosas que el gas importado obtienen ganancias excesivas a expensas de los usuarios.

Este régimen tarifario anticuado y profundamente injusto debe cambiar.

Reducir las tarifas eléctricas es esencial para respaldar la industrialización del país y lograr la descarbonización de nuestra economía.»

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