Desarman red de trafico de drogas en Colegios de Bogotá

La Fiscalía General de la República descubrió a “Olimpo”, una red de narcotráfico acusada de ser una de las mayores fabricantes y distribuidoras de las llamadas drogas sintéticas en escuelas y universidades de Bogotá.
Las evidencias recolectadas en casi un año de actividad investigativa permitieron identificar a los posibles integrantes de la organización, conocer sus roles y maniobras para ocultar y vender estupefacientes cerca de escuelas, universidades y lugares de entretenimiento nocturno en las ciudades de Antonio Nariño, Barrios Unidos. , Chapinero, Puente Aranda, Rafael Uribe Uribe, Suba y Usaquén, en Bogotá; y en Chía (Cundinamarca).
En este sentido, agentes del CTI del Ministerio Público detuvieron a cuatro de los presuntos articuladores de “Olimpo”. Durante el procedimiento se incautaron más de 500 pastillas de diversas drogas sintéticas, diversas cantidades de un bloqueante del sistema nervioso central, 55 teléfonos celulares, gramáticas, bolsas plásticas que contenían cocaína y marihuana, dinero en efectivo y un arma de fuego traumática.
Entre los detenidos se encuentra Blanca Rosa Betancourt Bedoya, alias La Abuela, una adulta mayor que, como principal cabecilla de la estructura criminal, sería la encargada de producir sustancias ilícitas y coordinar la venta al por menor de la llamada cocaína rosa (2CB). . o bimbo), LSD, éxtasis, marihuana, cocaína y sus derivados.
Los otros detenidos fueron identificados como Sergio Esteban Torres Borja, Félix Santiago Mejía Garavito y Bryan Enrique Pérez Araujo. En varias conversaciones conocidas por los investigadores, se determinó que estos individuos parecían haber comprado fentanilo y otros opioides o medicamentos para el dolor mezclados con drogas sintéticas para aumentar sus efectos nocivos.
Como consecuencia de estos hechos, un fiscal de la seccional de Bogotá imputó a los mencionados integrantes de “Olimpo” por los delitos de tráfico, fabricación y transporte de estupefacientes; y conspiración para cometer un delito grave.
Los acusados ​​no aceptaron los cargos y deben cumplir una pena de prisión en un centro penitenciario.

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